José López, definitivamente, no es uno más de los tantos y tantos José López que hay en la guía. ¿Pero quién es en realidad? Para comenzar con algo seguro, es el ex secretario de Obras Públicas de la Nación, segundo de Julio De Vido, funcionario de podríamos decir, de cuarta categoría hacia abajo. Ahora que tratando de entrar a un monasterio para esconder bolsas con varios millones de dólares, más dinero en otras monedas, joyas... una carmelita descalza descarriada, seguro que tampoco. 

      La sociedad argentina condena de primera intención, pero muchas veces no profundiza, se queda en el árbol, como se suele decir. Es muy dada a "muerto el perro, se acabó la rabia", sin pensar que detrás del perro rabioso, suele haber una jauría, no menos enferma. ¿A dónde vamos con tanta definición sociológica? A pedir que se investigue. Es mucho dinero, proveniente de ilícitos presumiblemente, ya que la declaración jurada patrimonial de López, rondaba el millón de pesos.

      ¿Pero cuánto de este dinerom era de él? ¿Todo, una parte, nada? ¿De quién era el resto, sino era todo propio?¿De qué ilícitos provenía, en caso de que lo fuera? Si hubo ilícito, de vueltos y coimas por licitaciones. seguro. Investigar no sólo significa probar que una persona fue sobornada y/o coimeada, sino averiguar quién sobornó y coimeó. Porque como nadie se pelea sólo, nadie recibe coimas o sobornos de sí mismo, sino que lo hace de otras personas, presumiblemente en nombre de distintas empresas

      ¿Y quienes són esos hombres y esas empresas? Que la justicia investigue, que se llegue al fondo, aunque se tratase de licitaciones y de empresas ligadas a los altísimos miembros del actual Gobierno, sus familiares, amigos, presuntos testaferros. Aunque se llegue a Lázaro Baéz, por más que salpique a su socio primo del presidente Macri, quien según Macri padre, es testaferro de su hijo Mauricio. Aunque haya más dinero repartido por distintos lados, incluyendo cuentas y empresas sospechosas en Panamá o forme parte de activos a punto de repatriarse en el próximo blanqueo de dinero... Y justo López, escondiendo dólares y demás bienes antes del blanqueo; ¿Tendrá algo que ver?

     José López, le hace un flaco favor al kirchnerismo, con este presunto ilícito. Por más que se tengan todas las pruebas para demostrarlo, la presunción no pasa a ser una certeza, antes de que la Justicia se expida. Por lo tanto, sería un error periodístico hablar o escribir culpando. Pero la sociedad no necesita y de hecho no espera a los tiempos de la Justicia. De todas formas, López es un ex funcionario, ya no decide nada y por tanto, a ningún ciudadano puede afectar más de lo que ya lo hizo y por lo que deberá pagar con años de cárcel, si es encontrado culpable. Sí afectó al kirchnerismo, muy sospechado por hechos de corrupción. De esta forma, le sirve un manjar al periodismo opositor a esta línea del peronismo y a los periodistas oficialistas, que van a tener mucho para alimentarse, olvidando los temas que realmente preocupan a los argentinos, como el tratar de llegar a fin de mes, las decenas de miles de despedidos, la inestabilidad laboral, la recesión con inflación altísima -una combinación fatal-, la inseguridad creciente, el blanqueo de capitales, las jubilaciones en camino al regreso de las AFJP, con aumento en la edad jubilatoria, entre muchos etcéteras. Tal vez llegue el informe especial de Lanata sobre López, antes de que el barbadomperiodista haga el de Mauricio Macri, de sus familiares y presuntos testaferros respecto a los Panamá papers. Y nombro a Macri, ya que es el presidente de los Argentinos en mandato, por lo cual es el máximo responsable de lo que le pasa y va a pasarle a los argentinos. López, como dijimos, es un ex que deberá pagar por lo que hizo, si es encontrado culpable. Pero ya fue, ¡Go home! o Go a la carcel, según corresponda, pero con quienes fueron complices o partícipes necesarios, para que puediera cometer sus ilícitos. Aunque esos complices, como dijimos, involucren a los funcionarios actuales -que ellos sí tienen poder de decisión con lo que les pasa a los argentinos-, aunque sean amigos, parientes o los propios funcionarios de este gobierno, desde el menos importante hasta el que hoy ocupa el sillón de Rivadavia.